Maria Antònia Munar presentó ayer el «Gobierno nacionalista» de Mallorca en el que figuran cinco asesores, que no tendrán plenos poderes hasta que el Parlament cambie la actual Ley de Consells Insulars. Hasta la presidenta del Consell deberá firmar los acuerdos económicos que adopte la institución hasta que no se modifique la actual legislación. Dichos asesores podrán compatibilizar sus funciones en el Consell Insular de Mallorca con sus respectivos despachos profesionales. El caso más criticado es el de Rafael de Lacy, quien ha sido nombrado asesor en Ordenació Territorial i Urbanisme mientras desde su despacho defiende intereses de promotoras de urbanizaciones.
Los otros asesores que ayer fueron presentados, y que cuando se cambie la Ley de Consells Insulars tendrán el cargo de consellers, son los siguientes: Josefina Sintes (Benestar Social), Mateu Sedano (Esports), Miquel Angel Borrás (Medi Ambient) y Miquel Angel Flaquer (Hisenda i Pressuposts). Todos ellos son de Unió Mallorquina. El resto de miembros del Gobierno del Consell son, además de Munar, Antoni Pascual y Maria Antònia Vadell, que ocuparán las vicepresidencias; Antoni Alorda, conseller de Cooperació i Foment; Miquel Nadal, conseller de Serveis Generals, y Cecili Buele, conseller de Cultura.
Munar destacó que «por primera vez Mallorca tendrá un Gobierno nacionalista, y por ello los mallorquines pueden estar satisfechos». Munar quiere un Consell «ágil y eficaz» y se mostró partidaria de «descentralizar los servicios». El Consell de Mallorca tiene previsto hacer la ordenación territorial de la isla y solicitar el traspaso de competencias en ésta área.