Cort dispone ya del informe técnico que anualmente realiza el Cuerpo de Bomberos sobre el estado de los ocho torrentes que transcurren por Palma. Este estudio se realiza durante los meses de verano con la intención de poder prevenir posibles desastres cuando lleguen las lluvias.
Este informe se remite ahora al área de Mantenimiento, a EMAYA y a la Conselleria de Medi Ambient, que es la que tiene las competencias sobre los torrentes. Por eso, el Ajuntament instará ahora al Govern a limpiar los cauces en aquellos tramos que se han detectado obturados o sucios.
Para empezar, del Torrent Gros se ha recorrido desde el campus de la UIB hasta la carretera vieja de Sineu y se ha podido comprobar que su estado es bueno en algunos tramos, pero desde su inicio comienzo hasta Son Penyaflor se aprecian descargas de escombros y basuras que podrían causar obstrucciones a la corriente de agua. Al llegar a la carretera vieja de Sineu existen abundante vegetación y vertidos de objetos, tales como bicicletas, electrodomésticos, etc.
Otro torrente importante, el de na Barbarà, también presenta tramos con abundante vegetación herbácea y arbustiva. En la zona de Son Fuster presenta, además, vertido de escombros, electrodomésticos, etc., que pueden causar obstrucción. A su paso por la carretera de Sineu se estrecha, lo que produce inundaciones endémicas. También hay peligro de obstrucción a la altura de una vieja fábrica de curtidos donde se está construyendo una urbanización.
El Torrent de Sant Magí se aprecia limpio, excepto en un tramo junto al Club de Tenis donde está encauzado en dos conductos, uno de los cuales está obstruido por ramas. El de sa Riera, también tiene exceso de vegetación a lo largo de su cauce y vertidos esporádicos de basura, escombros y electrodomésticos, es especial en el tramo entre Establiments y Son Anglada.
El Torrent dels Jueus está en muy mal estado, con vegetación, escombros, coches, etc., que constituyen un peligro de taponamiento en su última parte, la más estrecha. El de sa Síquia también tiene vegetación a la altura de las Maravillas y en su desembocadura acumula arena. Por último, el de Cala Major es peligroso al tener la desembocadura casi obturada por construcciones y tuberías y el del Mal Pas es una amenaza para la zona de la Residencia de la Bonanova por posibles inundaciones en planta baja.