Todos estaban invitados a acudir a la fiesta vestidos con los colores de la energía: naranja y rojo, aunque no todos lo cumplieron. Ocurrió en la fiesta de celebración del último verano del milenio, organizada por Champagne Veuve Clicquot Ponsardin y Bodegas Miguel Torres en el hotel Son Vida. El colorido del atuendo fue elegido por los organizadores por dos motivos. El primero, como «símbolo del exquisito refinamiento de las mágicas burbujas que protagonizan las más hermosas soirées en el mundo desde hace más de dos siglos, y el rojo, color del vino que degustaremos esta noche por primera vez».
Los invitados disfrutaron de una noche única. Entre ellos se encontraban Paloma Lago, con su marido Javier García Obregón; el presidente de Trasmediterránea, Josep Maria Trias; Eduardo Gamero, Syliane de Vilallonga "que acudió sola" y Enrique Puig, presidente de Aqua Brava, que vestía pantalón rojo y chaqueta blanca. También acudieron a la fiesta Agatha Ruiz de la Prada "una de las pocas invitadas que acudió vestida de naranja" con su marido, Pedro J. Ramírez, que vestía una camisa de ciertos tonos naranjas con rayas blancas. Champán con fresas, aceitunas y almendras integraron el aperitivo servido en la terraza del hotel, mirando a la bahía. Después, se sirvió una cena buffet.