La fiesta en honor a San Pedro, patrón de los pescadores, se celebró con calor y mucho público. El acto central fue la procesión terrestre marítima, organizada por la Cofradía de Pescadores San Pedro de Palma que trasladaron su fiesta al sábado, al ser laborable el día 29.
Por la mañana se celebró una misa en Santa Cruz, a la que asistieron el conseller de Indústria, Agricultura i Pesca, Josep Juan Cardona, y el presidente de la cofradía, Antonio Garau, además de pescadores jubilados.
A continuación, más de ochenta profesionales de la mar se reunieron a manteles en el restaurante Casa Eduardo degustando un exquisito menú preparado por la familia Carrasco a base de arròs de cego, sirviola a la mallorquina y flan con nata. Antonia, la propietaria, les obsequió a todos con una gorra con los colores mallorquinistas. Por la tarde la imagen de San Pedro salió en procesión desde Santa Cruz, presidida por el vicario Miquel Lliteras, precedida de xeremiers y portada por los pescadores Juan Lorente, Andrés Serrano, Miguel Angel Caldentey y Pedro Cantó. Acompañaron con remos Estefanía Parés, Emilio Sánchez, Jacob Parés y Cristóbal Díez. Portó el estandarte del año 1893 Mariana Amorós, hija y esposa de pescadores.
El paso de la imagen por el Passeig Sagrera fue controlado por agentes de la Policía del Port. En el Mollet esperaban impacientes más de 30 embarcaciones repletas de público que se hicieron a la mar siguiendo al Marjupe II.
En el concurso de embarcaciones engalanadas obtuvo el primer premio de arrastre el Arnau i Marc, segundo, Nou Pep Domingo, y tercero Illa del sol. En cerco, primera Nuevo Carrillo, y segundo Paco el loco. En artes menores, primero para Santa Isabel y segundo, Gallardo.