El president del Govern, Jaume Matas, firmó ayer sendos convenios de colaboración con los hospitales Cruz Roja y San Juan de Dios que garantizan el futuro del personal de estos centros. Y es que como señaló Matas desde que el Insalud anunció que dejaría de concertar servicios con estos centros una vez entrara en funcionamiento el Hospital General Son LLàtzer (Palma II) "previsto para el año 2000" se daba una situación de «inseguridad» tanto en la institución como entre el personal. «Con estos convenios "explicó el president Matas" se posibilita que el personal se incorpore en el Palma II (si cumple los requisitos recogidos en el futuro plan de empresa del hospital) o se integre en la organización sociosanitaria dependiente del Govern».
En total hay 260 trabajadores en ambos centros: 90 en Cruz Roja y 170 en San Juan de Dios. El conseller de Sanitat i Consum, Francesc Fiol, señaló que una vez solucionado el problema de los trabajadores queda por concretar el futuro de estos hospitales. Al respecto señaló que ambos dejarán de prestar atención sanitaria a enfermos agudos para reconvertirse en centro sociosanitario en el caso de San Juan de Dios "ya ha iniciado esta nueva función" y un centro sociosanitario o geriátrico en el caso del Hospital de la Cruz Roja.
El futuro definitivo de ambos hospitales así como de los hospitales Joan March y General queda delimitado en el Plan de Atención Sociosanitaria de Balears pendiente de su aprobación. Lo que ya está claro es que dejarán de prestar atención especializada para asumir más funciones de atención de enfermería.