Dentro de dos semanas los nombres de los cinco políticos que aparecen en las fotografías aparecerán encabezando las papeletas que los ciudadanos introducirán en las urnas el 13 de junio. Jaume Matas (PP), Francesc Antich (PSOE), Pere Sampol (PSM), Maria Antònia Munar (UM) y Eberhard Grosske (Esquerra Unida"Els Verds) pugnarán en las elecciones autonómicas más abiertas que se recuerdan desde que Cañellas logró por primera vez la Presidència del Govern.
Estas elecciones contarán con dos novatos que, curiosamente, son los máximos favoritos a ocupar la presidencia después de las elecciones. Francesc Antich y Jaume Matas encabezan por primera vez la lista de sus respectivos partidos políticos. En los anteriores comicios Antich y Matas iban en las candidaturas del PSOE y PP, respectivamente, pero en puestos intermedios. Por el contrario, Maria Antònia Munar, Pere Sampol y Eberhard Grosske ya saben lo que es la disputa por los votos.
Pero sólo uno de los protagonistas de las fotografías será el presidente del Govern balear después del 13 de junio. Posiblemente en esta ocasión no se sabrá quien será el presidente el mismo día de las elecciones, tal y como ocurrió en tres de las autonómicas celebradas anteriormente en Balears. Jaume Matas sabe que debe conseguir mayoría absoluta o, por el contrario, intentar un pacto con Unió Mallorquina.
Francesc Antich tiene la esperanza de que todos los votos, menos los del PP, le permitan acceder a la Presidència del Govern. Antich también cuenta con UM para que los socialistas gobiernen por primera vez en Balears.
Pere Sampol aspira a que su partido se consolide como la tercera fuerza política en Balears, y que el PP abandone el poder. El candidato del PSM será clave en los futuros pactos para que un presidente progresista se convierta en el nuevo inquilino del Consolat de Mar. En la misma situación está Eberhard Grosske, de Esquerra Unida, aunque el dirigente de izquierdas preferiría un pacto sin UM.
Munar también sabe que sus votos serán decisivos en la próxima legislatura, y como es habitual UM no quiere anticipar qué postura adoptará después de las elecciones ante un más que probable pacto de gobierno.