Un espectáculo hermoso el que ofrecieron las 276 parejas de baile de salón en la pista del polideportivo de Son Moix. El Open Internacional de Bailes de Salón, que se celebra por segundo año consecutivo en nuestra isla, se está consolidando con gran aceptación de público y participación. La jornada de ayer comenzó con la competición nacional en la modalidad de latinos, seguida por la internacional standars. En ambas competiciones se pudo apreciar gran calidad y nivel entre los participantes. Parejas llegadas desde Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Italia, Japón, Polonia, Rusia, Luxemburgo y España fueron recibidas con grandes ovaciones y aplausos del público presente, que no llenó las gradas de Son Moix, pero se hizo notar.
Hoy domingo el espectáculo continúa a partir de las diez y media de la mañana y hasta las seis de la tarde, hora en que tendrá lugar la clausura de este Open Internacional con entrega de trofeos, unos sesenta premios, a los ganadores.
Organizado por la escuela de baile Victory's, la participación de mallorquines en esta competición ha sido superior a la de la pasada edición. Los mallorquines han exhibido mejor nivel frente a las grandes parejas campeonas de otros países, sobre todo Alemania.
Además de buen talante y movimientos en perfecta coordinación con la pareja, se pudo apreciar la belleza de algunos vestidos y de algunas mujeres: se lucieron trajes cuyo coste oscila entre las 300 mil y cerca de un millón de pesetas.
Los trajes del hombre son más clásicos y tradicionales: chaqué o frac. Su precio ronda las cien mil pesetas. Otra de las curiosidades en cuanto a las mujeres es que las damas no pueden lucir ningún tipo de plumas, brillantes, colgantes ni joyas.
La importancia del baile de competición se ha visto resaltada al lograr su reconocimiento por parte del Comité Olímpico Internacional como deporte de exhibición en los juegos Olímpicos de Sidney 2000, pasando a ser una disciplina olímpica de pleno derecho. En Mallorca el baile de salón está teniendo gran aceptación, sobre todo entre la gente joven, aunque ello no se produce en la categoría de competición.