JOAN MASCARELL ¿Qué pasaría si acude a un curso de formación de técnico medio en prevención de riesgos laborales y le dan un «pobre» material de un curso de capacitación de nivel básico? ¿Y si además los profesores no saben explicar y transmite a los alumnos la sensación de que están perdiendo el tiempo? ¿Y si ocurre que nadie les da información clara sobre apuntes, metodología, y tipo y valor de las evaluaciones? ¿Y si da la casualidad que ese curso está organizado por la misma Conselleria de Treball i Formació? La respuesta es un plante que es precisamente lo que ocurrió ayer por la mañana con una treintena de asistentes al citado curso financiado por el Fondo Social Europeo que decidieron en vista de las circunstancias salirse de clase y no realizar un examen de conocimientos cuyos apuntes "una única copia para alrededor de 80 alumnos" habían sido dados el día anterior.
Otra treintena de alumnos sí decidió hacer la evaluación pero no por ello dejaron de respaldar al resto de compañeros en el sentido de denunciar la calidad del curso y presentar una protesta formal ante la conselleria al tiempo que exigen una reunión con los responsables de la conselleria. «A nosotros no nos interesa tener el certificado del curso si no aprovechar el curso y aprender que es justamente lo que no estamos haciendo», señalaban. Los que no hicieron la evaluación quisieron dejar bien claro que no se oponen a hacer esta prueba sino en las actuales condiciones.