La mortalidad general en Balears es elevada hasta el punto que las Islas están situadas entre las cinco comunidades con mayor número de fallecimientos. Esta es la principal conclusión de un estudio titulado «Análisis territorial de las causas y los condicionantes sociales de la mortalidad en España: el caso de Balears» elaborado por Mª Lluïsa Dubon Pretus, licenciada en geografía y especialista en demografía y que ayer fue expuesto en la Real Academia de Medicina y Cirugía de Palma de Mallorca.
La tasa estandarizada de mortalidad "válida como indicador de estado de salud y a la que no afecta si es una población joven o mayor" se sitúa en las Islas en el periodo 1990-94 en 9'04 defunciones por cada mil habitantes frente a la media estatal del 8'98. Delante de Balears se sitúan Andalucía, Murcia, Canarias y Valencia. La probabilidad de defunción hasta un año en las Islas (7'35 casos por cada mil) es en 1990 muy inferior a la media (7'67) pero sin embargo Balears ocupa el primer lugar en probabilidad de defunción tanto entre los jóvenes (20-25 años) como entre los maduros (40-45 años). La esperanza de vida (75'86 años) es la más baja del país.