El I Congrés de Llengua i Ensenyament a Mallorca, organizado por el Moviment d'Escoles Mallorquines, se inició ayer en el Auditórium de Palma con la participación de más de 300 personas, en su mayoría maestros y universitarios.
Este congreso, que tiene lugar los días 6, 7 y 8 de mayo, pretende crear un foro de reflexión sobre la situación de la lengua catalana. Durante tres días se expondrán ponencias y comunicaciones sobre el marco legal de la situación de la enseñanza catalana, la problemática del alcance de los libros de texto, la competencia lingüística de los docentes, la situación del catalán en la enseñanza privada, la integración y normalización de los alumnos de secundaria, el bilingüismo escolar, el aprendizaje de la lengua, la inmersión lingüística y mucho otros temas. El acto de apertura contó con la asistencia de representantes de algunas instituciones, como Miquel Sbert, director general d'Ordenació i Innovació del Govern; Pere Muñoz, coordinador de la Comissió de Cultura i Patrimoni del CIM; Mercè Gambus, vicerrectora de Extensión Universitaria de la UIB; Antoni Mir, presidente de la Obra Cultural Balear, y Maria Tous, presidenta del Moviment d'Escoles Mallorquines.
Antoni Mir destacó la independencia del Moviment d'Escoles Mallorquines, «imprescindible para ser críticos», y de cooperación con otras entidades para conseguir un mismo objetivo: la defensa de la lengua. Mercé Gambús hizo hincapié en la necesidad de la socialización de la lengua catalana y resaltó el elemento globalizador que representa.