La possessió de Son Moll, convertida desde hace poco más de un año en la granja escuela Jovent por iniciativa de nueve monitores del Club d'Esplai de sa Indioteria que se constituyeron en cooperativa, tendrá a partir del mediados de mayo unos inquilinos muy especiales: los refugiados albanokosovares que llegarán mañana a Madrid y que, tras un período de adaptación de unos veinte días, serán trasladados a Mallorca.
Los monitores de la granja escuela Jovent ofrecieron sus instalaciones a la Comissió Interdepartamental creada para coordinar y canalizar la ayuda a los desplazados de Kosovo en Balears y sin pérdida de tiempo recibieron una respuesta positiva, por lo que sus encargados han puesto a punto la granja para acoger a sus nuevos visitantes.
La granja escuela Jovent cuenta con dos grandes habitaciones, con 32 camas cada una, un comedor para cien personas, baños, cocina y una piscina adaptada para personas discapacitadas, así como duchas, rampas y accesos «sin barreras».
Xisca Montblanc, directora de la granja Jovent, explicó a Ultima Hora que su motivación para ofrecer sus instalaciones «ha sido saber que en el grupo de refugiados vendrán muchos niños, ya que nosotros estamos acostumbrados a trabajar con niños y disponemos de un lugar en el que éstos podrán disfrutar de su estancia en Mallorca».