El portavoz del Govern balear, Manuel Ferrer, opinó ayer que poner trabas a la compra de fincas por parte de los ciudadanos alemanes es una medida ilegal que va en contra de la Unión Europea. Ferrer salía al paso de las declaraciones realizadas el jueves por el presidente del Parlamento de Baden " Wutemberg, Peter Staub, quien ayer matizó sus palabras. El Govern calificó de «política irresponsable» que dirigentes políticos sólo acepten formar parte de la UE para «las cosas buenas, pero no para las malas». «Si algunos políticos no quieren formar parte de la Unión Europea que lo digan claramente», añadió Ferrer, quien recordó que algunas formaciones políticas de Balears han planteado abiertamente la adopción de medidas para frenar la venta de fincas a extranjeros.
En cualquier caso, el propio Peter Staub se encargó ayer de negar que plantease la adopción de medidas para evitar la adquisición de fincas por parte de los extranjeros. Staub comentó que lo que pretendía explicar es que en su región los ayuntamientos compran terrenos para venderlos posteriormente a los propios residentes. De esta manera garantizan que los residentes sigan en sus municipios y se evita que la especulación provoque un aumento excesivo en el precio del suelo. Staub añadió que en la rueda de prensa celebrada en el Parlament se le había malinterpretado o, por el contrario, sus palabras no fueron correctamente traducidas. El presidente del Parlamento de Baden Wutemberg aclaró que «los alemanes podrían tener bastante influencia en Balears, pero creo que no quieren ejercerla».