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Un ibicenco, preso en Caxias

Con carácter preventivo, Daniel R. aguarda la celebración del juicio en una cárcel portuguesa junto con otros siete reclusos españoles

Jaén Palacios acompañado de Diego Muñiz, ministro consejero de la embajada española en Portugal, y de un funcionario de la misma.

PEDRO PRIETO, ENVIADO ESPECIAL A PORTUGAL
El senador Manuel Jaén Palacios ha estado en Lisboa, visitando presos españoles, entre ellos un ibicenco llamado Daniel R., preso preventivo en la cárcel de Caxias, centro penitenciario rodeado de una doble verja pintada de verde, coronadas ambas por alambre de espino. El número de reclusos españoles en Caxias es de ocho, entre ellos, como hemos dicho, un ibicenco, siendo el menor "18 años" de Murcia. Todos están allí por el mismo motivo: el tráfico de drogas.

Nuestro paisano, que aparentemente goza de un excelente aspecto, le comentó a Jaén Palacios que iba ser trasladado de celda, pues en la que estaba había tenido algunos problemas con los otros dos reclusos con quienes la compartía. Seguramente irá a parar a la que están los españoles.

Daniel, que, insistimos, está en aquel lugar de forma preventiva, a falta de una sentencia definitiva "por tanto, tiene la presunción de inocencia" confesó que había ido a parar a aquel lugar por haber sido engañado, a la vez que le prometió que le escribiría una carta y explicaría su caso.

El recluso ibicenco, por su condición de preventivo, no está en condiciones de pedir el traslado a una cárcel española, de acuerdo al tratado multilateral firmado por todos los países de la UE, y el bilateral con países no comunitarios, existente, pero a nada que pueda tiene intención de hacerlo.

El ibicenco dedica parte de su tiempo a pintar, a tocar la guitarra y a cantar.

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