El frío reinante "se alcanzaron los 7º bajo cero debido a la ola de frío polar que azotó Europa" no fue obstáculo para que el primer viaje del Club del Suscriptor fuera un auténtico éxito. Era viernes, día 29, y el reloj marcaba las diez de la mañana. Los suscriptores, con una edad media que oscilaba entre los 35 y 40 años, disfrutaron del buen hacer de la acompañante de Halcón Viajes, Ana, que hizo posible que los trámites fueran rápidos y que el buen humor reinase en un trayecto de avión que pasó literalmente volando.
Andorra se había vestido de blanco para recibir a las cerca de treinta personas que llegaron al Principado dispuestas a disfrutar del deporte del esquí y, por qué no decirlo, de los precios que adornan sus tiendas.
El sábado fue el día elegido para demostrar la destreza de los suscriptores con los esquíes en los pies. Bien temprano accedieron a la pista de Soldeu soportando un frío glacial que se contrarrestaba con la luminosidad de un día despejado. Dejando a los más pequeños en compañía de un monitor, el resto de los componentes del viaje demostraron que, a pesar de ser novatos en esto de la nieve, cuando hay sentido del humor uno se siente como el mismísimo Tomba. Y mucho de eso debe saber Damià Campins que, lejos de la nieve, resbaló y se rompió el peroné. A pesar de todo, Damià se recupera satisfactoriamente y guarda un buen recuerdo del viaje. La última jornada transcurrió en Barcelona. Todo el grupo comió en el complejo lúdico Maremagnum, donde una excelente comida se combina con una oferta que no hizo más que redondear un fin de semana familiar.
Después pudieron disfrutar de una interesante visita panorámica por la Ciudad Condal "parada obligada ante la Sagrada Familia, el Parque Güell o la ciudad olímpica" que puso el punto y final a tres días repletos de buen humor y nuevos amigos.
Ahora sólo falta prepararse para la próxima cita, que será en Praga, entre el 18 y 21 de marzo.