Conselleria de Turisme y Federación Hotelera de Mallorca ultimaron ayer las modificaciones puntuales en el articulado del proyecto de la Ley General de Turismo, que serán tramitadas por el grupo parlamentario popular a lo largo de los dos próximos meses, para ser aprobado de forma definitiva antes del 31 de marzo.
Los cambios introducidos, según fuentes del Govern y patronales hoteleras, «se han circunscrito a cuestiones semánticas, dado que había que corregir la redacción de parte de los 77 artículos, así como de las disposiciones transitorias. El hecho en sí, es que un término mal utilizado podía llevar a equivocación, de ahí los cambios introducidos».
Desde la Federación Hotelera de Mallorca indicaron que habían rechazado la vía de los partidos de la oposición para intentar introducir enmiendas: «Desde el primer momento hemos querido evitar la politización sobre esta cuestión, dado que la postura de la asamblea general de la Federación simplemente aprobó en su día que se realizaron los oportunos cambios de redacción, que se estructura de otro modo la Ley de Turismo, ya que el proyecto de la ley demostraba o daba a entender un total desconocimiento de los usos y costumbres del sector. Se han cuidado las formas y estamos satisfechos del resultado de las intensas negociaciones habidas durante los últimos días con los representantes de la Conselleria de Turisme».
Los hoteles Carotti, Marinela y Safari desaparecen para
construir nuevos hoteles
El proceso de intercambio de plazas que se establece en el proyecto
de Ley de Turismo, cuya fórmula está vigente desde la aprobación
del Plan de Ordenación de la Oferta Turística (POOT) en 1995, fija
que hasta 100 plazas, se conceden dos plazas nuevas por cada una
que se de baja; entre 101 y 200 plazas, 1'75 nuevas plazas por cada
una dada de baja; entre 201 y 300 plazas, 1'75 nuevas por cada una
dada de baja. Y en el momento en que se superan las 300 plazas, se
ofrece una nueva por cada una dada de baja, produciéndose en este
intercambio el crecimiento cero.
Bajo esta fórmula, la desaparación de los hoteles Carotti (ubicado en Port de Pollença, con categoría de una estrella y 60 camas), Marinela (una estrella, 136 camas y ubicado en Ciudad Jardín) y Safari (dos estrellas, 76 camas y también en Ciudad Jardín), ha permitido que se realicen dos proyectos de construcción de hoteles de cuatro estrellas en el Port de Pollença y Port de Andratx (intercambio con el hotel Safari), así como uno de cinco en Platges de Muro.