El equipo de Gobierno de Cort presentará hoy al pleno una propuesta por la que se instará al Parlament de les Illes Balears a rectificar el punto del Estatut de Balears en el que establece que el topónimo de la ciudad es Palma y a cambiarlo por el de Palma de Mallorca.
En efecto, la reforma del Estatut, que entró en vigor el pasado mes de diciembre, elimina el topónimo Palma de Mallorca, que a partir de ahora se denominará únicamente Palma, en contra de la decisión tomada por el Gobierno municipal en abril del año pasado de que el nombre oficial de la capital balear es Palma de Mallorca.
Al mismo tiempo, la oposición municipal presentará hoy una propuesta por la que se solicita el inicio de un expediente jurídico-histórico para oficializar el nombre de Palma, pues la competencia para cambiar la denominación de una ciudad es del propio ayuntamiento. Pero el teniente de alcalde de Urbanismo, Carlos Ripoll, ya anunció ayer que «lógicamente la rechazaremos».
El portavoz popular defendió que «la voluntad política del Ajuntament es que el nombre oficial de la ciudad es Palma de Mallorca, independientemente de que coloquialmente hablemos de Palma o de que, incluso, en los papeles no oficiales aparezca sólo Palma».