Somos una asociación de vecinos pacífica y dialogante que no recibe respuestas. Sólo pedimos servicios sencillos de los que carecemos. Si no nos escuchan estamos dispuestos a salir a la calle», señalan sus representantes.
Mientras la Asociación de Vecinos de Génova lucha por salvaguardar los intereses comunes, el actual presidente, Jaume Sitjar junto a Antonio Barceló, vocal y vecino desde hace 67 años, se encargan de reivindicar las necesidades de este barrio de características especiales, que intenta proteger su antiguo carácter frente a la proliferación urbanística.
El exagerado número de restaurantes, más de 22 hasta el momento, ha convertido Génova en una zona saturada con graves problemas de tráfico y contaminación.
«La enorme afluencia de vehículos de personas que acuden a los restaurantes abiertos en la barriada "comentan fuentes de la asociación de vecinos" nos está provocando graves perturbaciones, dado que los visitantes aparcan donde les parece, impidiendo incluso la entrada a los vecinos en sus propios domicilios». La asociación entiende que hay dos maneras de solucionar el problema. Declarar una moratoria que impida nuevas aperturas y que el Ajuntament compre terrenos para construir más aparcamientos. Por otra parte... «sería importante "añade el presidente" que las autoridades competentes en materia de Actividades Molestas revisasen las instalaciones de los restauranates, dado que los humos de sus cocinas y asaderos causan muchas molestias al vecindario.
Más transporte público para la barriada
Una reivindicación importante es la posibilidad de que los
autobuses de la línea 5 lleguen a Génova, lo que permitiría a la
barriada disponer de un servicio de transporte público cada 20
minutos. Esta posibilidad haría disminuir sustancialmente el uso
del automóvil hacia el centro de Palma, teoría compartida por la
mayoría de los urbanistas. La prolongación de la línea sería de 800
metros más, lo que no supondría un aumento de costos para la
EMT.
La asociación está en contra de la permisión en zonas no edificadas de parcelaciones que permiten solares de 150/200 m2 con facultad de adosarse.