El Consell Insular de Mallorca tiene unos ingresos por habitante de 18.912 pesetas, según datos de 1996, lo que sitúa a la institución insular a la cola de la financiación en organismos de las mismas características.
Mientras las diputaciones del País Vasco disponen de una financiación per cápita de 386.641 pesetas, sólo las diputaciones de Catalunya tienen unos ingresos por habitante por debajo del CIM. Estos datos, según la Comissió d'Hisenda, confirman la gran dependencia financiera que tiene el Consell. «El Ejecutivo autonómico sigue gestionando competencias que deberían haber sido transferidas hace tiempo a los consells», lamentan desde la institución insular.
En su análisis comparativo la Comissió d'Hisenda ha utilizado datos de las diputaciones de Catalunya, Andalucía, Galicia, Comunitat Valenciana, Extremadura, Aragón, Castilla"La Mancha, Castilla"León y los cabildos de Canarias. Son instituciones que, en la práctica, cumplen las mismas funciones que los consells insulars, aunque la situación varía según cada comunidad autónoma.
En cualquier caso, la media de financiación de estas instituciones supera con creces los ingresos por habitante que tiene el Consell. Así, la media es de 47.500 pesetas por habitante, muy lejos de las 18.912 pesetas del Consell.