Los tranvías procedentes de Portugal adquiridos hace dos años por el Ferrocarril de Sóller SA comenzaron ayer a ser operativos, una vez superada la etapa de pruebas. La puesta en circulación de los coches procedentes de la capital lusa coinciden con el inicio de una nueva serie de obras de renovación de la infraestructura de la empresa.
Los vagones portugueses fueron restaurados en un taller de Zaragoza y, ya en las cocheras de Sóller, han sido adaptados a las características de la línea del Port de Sóller.
El automotor «portugués» realiza por el momento el servicio entre el mercado de Sóller y el núcleo portuario y viceversa debido a que entre la estación del tren y la Plaça Constitució de Sóller se está procediendo a la renovación de las vías. Así, los pasajeros que llegan a Sóller en ferrocarril deben andar hasta el mercado para poder subir al tranvía. Para cualquier eventualidad, un tranvía de emergencia ha quedado en la céntrica plaza. Josep Ripoll, portavoz del Ferrocarril de Sóller, informó ayer a este periódico de que las obras de renovación de los raíles pueden costar de 15 a 20 millones de pesetas. Las obras se realizarán con la mayor rapidez posible. También se construirá un nuevo cruce frente a La Caixa y la Cruz de los Caídos. Desde hace años la empresa aprovecha la temporada baja para renovar las instalaciones.