No pudieron contener los gritos y los aplausos. Más de 150.000 personas se concentraron en las calles más céntricas de Palma para saludar a los Reyes Magos de Oriente, que llegaron al puerto de Palma a bordo del barco Far de Portopí, acompañados de unos fuegos artificiales poco llamativos.
Fueron casi cinco kilómetros, recorridos en dos horas, donde 24 carrozas, 14 comparsas y seis bandas de música hicieron las delicias de los más pequeños.
El Rey Baltasar y Mulan levantaron una expectación inusitada, al igual que el Tío Vivo, los bomberos y la nieve y los regalos entregados a las puertas de El Corte Inglés de las Avingudes.
No faltaron, además, regalos (demasiados en este año), una carroza dedicada a los vídeo-juegos y una comparsa dedicada a la solidaridad.
A las 19.35 horas llegaron los Reyes al Ajuntament y poco a poco fueron haciendo lo propio las 500 personas que integraron la comitiva real. Allí fueron recibidos por Joan Fageda, alcalde de Palma, que pidió a los Reyes «salud», y miembros de la Corporación. También se encontraban en Alcaldía Joan y Llorenç Huguet y Maria Salom. La cabalgata se desarrolló con normalidad, con todos los detalles retransmitidos en directo por TeleNova. Gaspar no tuvo problemas con su carroza "como el año pasado" y el tiempo acompañó.