Cumpliendo con la tradición, la entonación de la Salve a la Mare de Déu de la Salut en la iglesia de Sant Miquel por parte de los miembros del Consistorio palmesano abrió ayer por la tarde el programa de actos oficiales de la Festa de l'Estendard.
Finalizado el acto religioso, los ediles se encaminaron hacia la Plaça d'Espanya, donde tuvo lugar el acto solemne de homenaje a la figura del rey. Tras la lectura del pregón y las ofrendas dio comienzo la quinta edición de la Revetla popular de la Conquesta, organizada por la Fepae.
La fiesta congregó a numeroso público que ese año no necesitó huir del frío reuniéndose alrededor de los foguerons de botifarrons, longanizas y carne asada, con pan de payés.
La climatología acompañó casi todo el tiempo al buen ambiente reinante y fueron muchos los ciudadanos que disfrutaron de la comida y la música en directo, pero las nubes negras que llevaban amenazando casi toda la tarde, acabaron por descargar con gran fuerza al filo de las diez de la noche, ahogando la poca fiesta que quedaba.
El alcalde y algunos concejales del Consistorio palmesano
participaron de la Revetla en sus primeros momentos.
Pero horas antes de todo esto sucediera, el Ajuntament había
homenajeado, por la mañana, a los dieciocho funcionarios que se han
jubilado durante este año, diciendo adiós a una media de 35 años de
servicio a la ciudad.