La visita de los niños al hospital suele ser en la mayoría de los casos traumática en cuanto que supone sacarlos de su medio habitual y adentrarlos en un mundo que les es hostil. Con el objetivo de que pierdan el temor a ir al médico y su estancia durante la espera a ser recibido por el especialista sea más agradable ayer se inauguraron las nuevas consultas pediátricas de Son Dureta.
La principal ventaja es que se han separado de las consultas de adultos con las que hasta ahora compartían tanto edificio (el pabellón verde) como despacho.
Las nuevas consultas pediátricas están ubicadas en la planta baja del pabellón materno infantil y contarán con una zona de juegos junto a los despachos para la espera de los niños y un parque infantil que se instalará frente la entrada del pabellón materno infantil. Ayer fueron inauguradas las nuevas instalaciones, que han tenido un coste cercano a los 30 millones de pesetas, con la presencia del gerente del hospital, Sergio Bertrán, el director general de Sanitat del Govern, Joan Crespí, el gerente de Atención Primaria de Mallorca, Josep Corcoll y, la Jefa de Pediatría, Joana María Román así como del personal que trabaja en el servicio o está relacionado con él.
La actividad aumentará un 30% Las nuevas consultas externas de pediatría de Son Dureta han quedado en ocho, seis generales, una de traumatología infantil y otra de cirugía pediátrica. La reforma de las consultas pediátricas supone además de una mejora de las condiciones sanitarias una mejora de las condiciones de trabajo del personal así como un aumento de su capacidad de atención a enfermos. Según explicó el gerente del hospital, Sergio Bertrán, la actividad de consultas pediátricas se incrementará en torno a un 30% en cuanto que, entre otras cosas, aumentarán las horas que los médicos dedican a consultas. Además de la mejora de infraestructura y mobiliario se ha procedido a informatizar el servicio lo que permitirá almacenar las historias clínicas de los pacientes y tener acceso directo a Internet.