Viviendas desaparecidas, cultivos arrasados, infraestructuras de comunicación destruidas y miles de personas sin hogar es lo que se han encontrado Francisco Sánchez, Pilar Mesquida y Sabino Elejondo, cooperantes de Medicus Mundi Balears, en su viaje a Honduras, donde han visitado San Pedro Sula y Barra de Patuca, y han podido comprobar la devastación que ha provocado el huracán Mitch.
A su regreso a Mallorca, Francisco Sánchez, médico de esta ONG, afirma que es necesario un plan de acción coordinado entre las administraciones isleñas y distintas ONG que tienen experiencia en cooperación de gran envergadura, para evitar la dispersión y pérdida de recursos.
Medicus Mundi Balears cree que el plan debería abarcar el mayor número de zonas posible, «ya que de nada sirve que toda la ayuda se concentre en el departamento de Cortés y se abandone a todos los de alrededor, explica Francisco Sánchez, quien anunció que Medicus Mundi tiene previsto exponer su análisis al Govern para que las ayudas que piensa enviar resulten lo más eficaces posible.
«Dado que la ayuda alimentaria de emergencia está muy bien organizada, lo principal es la construcción de viviendas. En el departamento de Cortés "dice Sánchez", los damnificados son entre 8.000 y 10.000, que están viviendo, una parte, en estadios de fútbol y, otra, en las riberas de las autopistas que unen la ciudad de San Pedro Sula con el aeropuerto, en cubículos formados por unas maderas y un plástico por techo».