La primera jornada del nuevo emplazamiento de salida y llegada de los autocares de la Part Forana elegido por los responsables de Cort se saldó, ayer, con el despiste general y confusión de usuarios, conductores y vecinos.
Los autobuses aparcaron en las calles Marquès de Fontsanta, Miquel Marquès y Eusebi Estada, por primera vez en los últimas tres decadas, debido a las obras que se están realizando en el futuro Parc de ses Estacions. La mayoría de los usuarios no conocía este nuevo emplazamiento, según los testimonios recogidos ayer por este diario, mientras que los conductores de los autocares exteriorizaron su enfado por varios motivos. «No hay policías municipales regulando el tráfico, tenemos que hacer verdaderos encajes de bolillo para sortear el tráfico y llegar hasta aquí, hemos coincidido con una poda de árboles y nuestros vehículos no disponen del espacio suficiente para aparcar», dijo José Horrach Quetglas, de la empresa Autocares Pujol.
Otro conductor, de Autocares Caldentey, calificó de «caótica» la primera jornada en la que se han visto obligados a utilizar un área de salida y llegadas distinta al que empleaban en la antigua estación: «Peor no se pueden hacer las cosas», señaló, «ya que este sitio no reúne los requisitos para que cada día se estacionen aquí decenas de autocares. En primer lugar, el giro por el Bar Palacios es muy complicado, hay calles con doble circulación y este sitio es muy reducido y no sé qué es lo que ocurrirá en verano, cuando se triplica el número de autocares».