Más de 239.000 personas se han visto afectadas en Maiduguri, capital del estado de Borno, en el noreste de Nigeria, por las «graves inundaciones» ocasionadas después de colapsar este martes una presa, informó la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA). En un informe emitido a última hora del martes, la OCHA señaló que la presa de Alau, situada a unos 25 kilómetros de la capital estatal, que tiene más de 800.000 habitantes, se desbordó tras «daños estructurales y continuas lluvias intensas».
Entre las 239.000 personas afectadas por las inundaciones se encuentran residentes de campos de desplazados internos en Borno. «Un número no confirmado de personas ha muerto o resultado herido», indicó la agencia de la ONU, al añadir que «el acceso a hospitales, escuelas y mercados se ha visto obstaculizado» y «se han registrado daños a la infraestructura, incluidos puentes».
En declaraciones recogidas este miércoles por medios locales, el portavoz de la Agencia Nacional de Emergencias de Nigeria (NEMA, por sus siglas en inglés), Manzo Ezekiel, afirmó que «aproximadamente el 70 por ciento de la ciudad ya está bajo el agua». «Nuestro equipo están allí y estamos trabajando con la agencia estatal de manejo de emergencias para brindar el apoyo necesario y salvar vidas de las inundaciones», agregó Manzo. Asimismo, las inundaciones en el zoo de Maiduguri han provocado que algunos animales salvajes, incluidos cocodrilos y serpientes, escapen de sus recintos.
El presidente de Nigeria, Bola Ahmed Tinubu, expresó su «más sentido pésame al gobierno y al pueblo del estado, especialmente a las familias que han perdido sus medios de subsistencia debido al desastre provocado por el desbordamiento de la presa de Alau», según un comunicado firmado por su asesor especial de Información y Estrategia, Bayo Onanuga. Mientras las autoridades evalúan los daños causados por las inundaciones, el presidente pidió «la evacuación inmediata de las personas de las zonas afectadas» y subrayó que el Gobierno federal «está dispuesto a colaborar para abordar las necesidades humanitarias inmediatas» de la población damnificada.
El vicepresidente de Nigeria, Kashim Shettima, llegó a Maiduguri este martes para realizar una evaluación sobre el terreno del desastre. La catástrofe agrava aún más la situación humanitaria de Borno, que sufre ataques del grupo yihadista Boko Haram desde 2009, una violencia que se agudizó a partir de 2016 con la aparición de su escisión, el Estado Islámico en la Provincia de África Occidental (ISWAP, en inglés).