El alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, afirmó este jueves que los golpes de Estado militares como el sucedido en Gabón «no son la solución», pero afirmó que ese vino precedido de un «golpe institucional» con unas elecciones presidenciales irregulares.
«Los golpes de Estado militares no son la solución, pero no hay que olvidar que en Gabón antes había habido unas elecciones llenas de irregularidades y que hay golpes de Estado militares y hay golpes de Estado institucionales, que no hace falta usar las armas», afirmó Borrell ante la prensa a su llegada a la reunión informal de ministros de Exteriores de la UE que se celebra en Toledo.
«Pero si yo truco unas elecciones para conquistar el poder, pues también eso es una manera irregular de llegar a ejercer el poder», agregó. Los militares han disuelto todas las instituciones de Gabón poco después de que la comisión electoral del país informase de la victoria del presidente, Ali Bongo -en el poder desde la muerte de su padre en 2009-, en las controvertidas elecciones del pasado día 26, que la oposición considera fraudulentas.
El autodenominado Comité para la Transición y la Restauración de las Instituciones (CTRI) aseguró que esas votaciones no fueron transparentes, creíbles ni inclusivas, y acusaron al Gobierno del país de gobernar «irresponsable e impredeciblemente». Josep Borrell también recalcó este jueves que, en Gabón, «no hay por el momento ninguna previsión de evacuación» de los aproximadamente 10.000 ciudadanos europeos que se encuentran allí, ya que «la situación es calma» y «no vemos ningún riesgo de violencia de una situación que pueda provocar peligro».
Además, afirmó que ningún país europeo ha manifestado preocupación por la situación de sus ciudadanos. «No está previsto una evacuación en Gabón como ya se hizo en Níger», señaló, en referencia al reciente golpe de Estado que también ha sufrido ese país, donde «la situación es radicalmente distinta» que en Gabón.
El jefe de la diplomacia comunitaria consideró que la situación en África «no es exitosa» a causa de la proliferación de golpes militares o la presencia de mercenarios del grupo ruso Wagner en República Centroafricana, Mali o Burkina Faso.
«Vamos a tener que revisar a fondo nuestra política (hacia África), es una voluntad de cooperación que siempre ha sido la nuestra», aseguró, y añadió que van también a «escuchar con mucha atención» a la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao), porque «las soluciones a esos problemas tienen que venir de las instituciones africanas».
Este jueves los ministros de Exteriores de la UE continuarán las discusiones sobre Níger iniciadas en las últimas horas por los titulares de Defensa, que abordaron la preparación de sanciones autónomas por parte de los Veintisiete en concordancia con las ya impuestas por ese país a los golpistas nigerinos. «Tenemos que hacer lo que tenemos que hacer. Tenemos que sancionar a la junta en Níger, tenemos que ser muy fuertes en eso», concluyó Borrell.