Los talibán han intensificado la persecución contra las personas que han trabajado para o colaborado con las fuerzas de Estados Unidos y la OTAN, según revela un documento confidencial de Naciones Unidas al que ha tenido acceso la BBC.
«Los talibán están arrestando y/o amenazando con matar o detener a miembros de las familias de individuos concretos a menos que se rindan ante ellos», dice el documento, elaborado por el Centro Noruego de Análisis Globales, que proporciona información de Inteligencia a la ONU.
«Los talibán avanzan en el rastreo de personas antes de tomar el control de todas las ciudades importantes», agrega el informe, que señala que aquellos que corren más riesgo son aquellos que ostentan cargos en el Ejército, la Policía o unidades de investigación.
De forma paralela, advierte de que los insurgentes ya reclutan a personas para integrar nuevas redes de informantes que colaboren con el futuro gobierno talibán, después de que Afganistán haya caído en sus manos.
El director ejecutivo de la Unidad de Respuesta Rápida del Centro Noruego de Análisis Globales, Christian Nellemann, consultado por Europa Press, indica que «puede confirmar» que lo que se denuncia en el documento «es auténtico». «Se dirigen (los talibán) contra las familias de aquellos que no se han rendido y las juzgan y castigan de acuerdo con la sharia», ha añadido.
Nellemann también ha asegurado que el organismo espera que tanto las personas que trabajaron con Estados Unidos, la OTAN y sus aliados, como sus familias, «sean expuestos a torturas y ejecuciones».
«Esto pondrá aún más en peligro los servicios de Inteligencia occidentales, sus redes, métodos y su capacidad para contrarrestar a los talibán, Estado Islámico y otras amenazas terroristas», ha advertido.