El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y Yihad Islámica han asegurado a primera hora de este miércoles que los ataques con proyectiles contra territorio de Israel continuarán «hasta que el enemigo ponga fin a su agresión», en medio de un nuevo recrudecimiento del conflicto desde el lunes que ha dejado 35 palestinos y cinco israelíes muertos.
La Sala Conjunta que integran los brazos armados de ambas facciones, consideradas como grupos terroristas por Israel, ha señalado que la bautizada como operación 'Espada de Jerusalén' continúa» para proteger al pueblo y los lugares sagrados», en lo que ha descrito como «una batalla sagrada», según ha informado la agencia palestina de noticias Maan.
Así, han ensalzado la figura de los familiares de los muertos por los bombardeos y han subrayado que «la sangre de sus hijos no será derramada en vano», antes de recalcar que «aún tienen mucho en el arsenal si el enemigo continúa con la agresión».
En este sentido, han confirmado el lanzamiento de «más de 300 cohetes y proyectiles» contra territorio israelí durante la jornada del martes, en lo que han descrito como la «mayor» operación de este tipo «en la historia del conflicto».
Por otra parte, han hecho un llamamiento a los palestinos en Cisjordania, Jerusalén Este e Israel para que «golpeen al enemigo donde sea posible». «Tienen los medios para que el enemigo ponga fin a sus acciones contra nuestros lugares santos y nuestro pueblo», ha remachado la Sala Conjunta.
El Ejército de Israel ha indicado a través de su cuenta en la red social Twitter que durante las últimas 38 horas han sido disparados más de 1.050 cohetes contra el sur y el centro de Israel. «Esto debe parar», ha manifestado, mientras mantiene sus bombardeos contra la Franja.
En este sentido, ha asegurado haber «neutralizado» al jefe de Inteligencia Militar de Hamás, Hasán Kaogi y a su 'número dos', Uail Isa, quien era además jefe del Departamento de Contraespionaje e Inteligencia Militar. «Parece que nuestra información de Inteligencia era mejor», ha añadido.
El Ejército israelí ha manifestado además que ha bombardeo «un número de objetivos terroristas significativos y operativos terroristas en la Franja de Gaza», en lo que ha descrito como «los mayores bombardeos desde 2014», en referencia a la operación 'Margen protector'.
En otro orden de cosas, ha confirmado la interceptación de un dron lanzado por Hamás y que cruzó la frontera entre la Franja de Gaza e Israel. «No toleraremos ninguna violación de la soberanía israelí», han zanjado las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).
Las autoridades de Gaza, controlada por Hamás, han detallado durante la jornada que entre los últimos objetivos bombardeados figuran decenas de edificios gubernamentales, incluidas comisarías, edificios de Interior y Seguridad y otras instalaciones, según la agencia Maan.
El portavoz del Ministerio de Sanidad gazací, Ashraf al Qidra, ha elevado a 35 los palestinos muertos a causa de los bombardeos, entre ellos al menos doce niños, al tiempo que ha denunciado el impacto psicológico sobre los menores de la campaña de bombardeos por parte de Israel.
Por su parte, las autoridades israelíes han confirmado la muerte de cinco personas por el impacto de proyectiles disparados desde la Franja. Las víctimas son dos mujeres residentes en Ascalón, un hombre y su hija de 16 años, residentes en los alrededores de Lod, y una mujer residente en Rishon Lezion.
El alcalde de Lod, Yair Revivo, ha desvelado que los dos muertos por el impacto de un proyectil contra su vehículo son miembros de la comunidad árabe de la ciudad, escenario de disturbios durante las últimas horas. «Los misiles de Hamás no diferencian entre judíos y árabes», ha dicho.
Hidai Zilberman, portavoz del Ejército israelí, ha asegurado que el sistema antiaéreo 'Cúpula de Hierro' ha interceptado entre el 85 y el 90 por ciento de los proyectiles disparados contra zonas pobladas, antes de adelantar que Hamás podría mantener el ritmo de ataques durante unos días, según el diario 'The Times of Israel'.
«El aguante de Hamás se está acabando, pero es una organización con aguante. No terminará en 24 horas», ha sostenido. El Gobierno israelí aprobó el lunes una campaña de bombardeos contra el enclave, descartando por el momento la posibilidad de una incursión terrestre.
Israel habría rechazado, por otra parte, la propuesta planteada por Naciones Unidas y Egipto de un alto el fuego con Hamás, según la agencia estatal turca de noticias, Anatolia, y recogen medios israelíes. Presuntamente, Egipto y Naciones Unidas estarían trabajando para lograr detener los enfrentamientos.
En esta línea, la cadena de televisión israelí Channel 12 ha indicado que mediadores egipcios están trabajando para lograr un alto el fuego entre las partes, si bien analistas de la cadena han señalado que Israel no estaría interesado en alcanzarlo hasta que haya logrado una serie de objetivos militares.
Los nuevos enfrentamientos han estallado después del aumento de las tensiones en Jerusalén, al alza por las órdenes de desahucio de familias palestinas en el barrio de Sheij Jarrá, en Jerusalén Este, que se recrudecieron durante los últimos días para protestar contra la represión por parte de las fuerzas de seguridad israelíes, que dejaron cientos de palestinos heridos.
Las tensiones alcanzaron su máximo el domingo, cuando las fuerzas israelíes irrumpieron nuevamente en la Explanada de las Mezquitas --lugar conocido como Monte del Templo por los judíos-- y lanzaron gases lacrimógenos incluso en el interior de la mezquita de Al Aqsa, el tercer lugar más sagrado para los musulmanes.
En respuesta, Hamás lanzó varios proyectiles contra Jerusalén y sus alrededores, tras varias advertencias a Israel sobre la represión policial, lo que llevó a Israel a responder con una campaña de bombardeos contra el enclave, a la que las facciones palestinas han respondido incrementando sus disparo de cohetes.