El primer ministro de Armenia, Nikol Pashinián, ha tildado este jueves de «intento de golpe de Estado» el llamamiento formulado del Ejército a favor de la dimisión del Gobierno tras el cese de un alto cargo de las Fuerzas Armadas.
«Considero el comunicado del Estado Mayor como un intento de golpe de Estado militar», ha señalado Pashinián a través de su cuenta en la red social Facebook, al tiempo que ha pedido a sus seguidores que se concentren en la Plaza de la República de la capital, Ereván, para protestar.
Tras ello, ha desvelado en un vídeo publicado en Facebook que ha dado orden de cesar al jefe del Estado Mayor del Ejército, Onik Garparián, al tiempo que ha agregado que era una decisión prevista antes de la publicación del citado comunicado pidiendo su dimisión.
Pashinián ha destacado en el vídeo que «ha asumido personalmente toda la responsabilidad de lo ocurrido» y «ha hecho todo lo posible para responder a las preguntas que se le han planteado» en lo relativo al conflicto con Azerbaiyán en torno a Nagorno Karabaj.
«Hemos llegado a una etapa en la que, desafortunadamente, no podemos evitar hacer preguntas a algunos altos cargos militares, porque si queremos saber toda la verdad sobre la guerra tenemos que hacer preguntas a estos militares», ha argumentado, según ha recogido la agencia armenia de noticias Armenpress.
«A nuestros queridos generales no les ha gustado el hecho de que nosotros, el público, la autoridad, civil, el Gobierno podamos hacer preguntas sobre algunos hechos, pero es inevitable», ha manifestado. «Debemos saber las respuestas a estas preguntas sobre un combate concreto. Necesitamos entender los lazos entre algunos oficiales y algunos círculos políticos, que eran las personas que se comunicaban con el Ejército durante la guerra», ha explicado.
Por ello, ha tachado de «intolerable» el papel del Ejército en política y ha desvelado que nombrará «pronto» a un nuevo jefe y a un 'número dos' del Ejército. «Invito a todo el mundo a acudir a la plaza de la República para hablar de nuestros planes y discutir varios asuntos urgentes», ha manifestado.
Pashinián ha hecho pese a todo un llamamiento «a la calma» y ha dicho que la reunión en la céntrica plaza será «un encuentro civil pacífico». «Quiero pedir al Ejército que siga cumpliendo su función en defensa de Armenia», ha puntualizado. «Todo está bajo control y cualquier acción que contradiga el proceso de servicio debe ser descartada», ha zanjado.
Por su parte, el bloque de Pashinián en el Parlamento ha expresado su apoyo al primer ministro y ha tildado de «paso inconstitucional» el comunicado del Ejército. «Es lamentable que la gente responsable de la seguridad del país esté mostrando deliberadamente un comportamiento irresponsable», ha argüido.
El Defensor del Pueblo, Arman Tatoián, ha resaltado además que «la situación en el país requiere esfuerzos excepcionales para garantizar la solidaridad y el respeto de los Derechos Humanos» y ha pedido evitar cualquier suceso que incremente las tensiones.
Poco antes, el Estado Mayor del Ejército armenio había publicado un comunicado firmado por su cúpula y cerca de 30 comandantes en el que resaltó que «el primer ministro y el Gobierno no son ya capaces de adoptar decisiones razonables», según Armenpress.
Los firmantes se han mostrado críticos con la decisión del primer ministro de cesar al 'número dos' del Estado Mayor, Tiran Jachatrián, y han expresado su «protesta decidida» ante esta decisión.
Así, han resaltado que el cese de Jachatrián se fundamentada en «razones miopes» y «no tiene en cuenta los intereses nacionales y del Estado». «En unas condiciones tan difíciles para el país, esta decisión es contraria al Estado y un paso irresponsable», han añadido.
«Desde hace mucho tiempo, las Fuerzas Armadas armenias han tolerado con paciencia los 'ataques' por parte del Gobierno destinados a difamar a las Fuerzas Armadas, pero todo tiene sus límites», han señalado, antes de acusar al Ejecutivo de «no ser efectivo» y de cometer «graves errores en política exterior» que han acercado al país a su destrucción.
El Estado Mayor ha hecho así una referencia velada a la reciente guerra con Azerbaiyán en torno a la región de Nagorno Karabaj, que estalló en septiembre de 2020. «El Ejército siempre ha estado con el pueblo, igual que el pueblo está con el Ejército», ha remachado en su comunicado.
«Ante la situación actual, el Estado Mayor del Ejército pide la dimisión del primer ministro y del Gobierno y advierte contra el uso de la violencia contra la gente cuyos hijos murieron defendiendo la patria y Artsaj --nombre de la autoproclamada república de Nagorno Karabaj--», ha zanjado.
Por su parte, la Presidencia de Rusia resaltado que sigue «con preocupación» la situación en Armenia y ha hecho un llamamiento a la calma en la antigua república soviética, tal y como ha recogido la agencia rusa de noticias Sputnik.
«Por supuesto, llamamos a todos a la calma», ha dicho el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, quien ha incidido en que «la situación debe mantenerse en el marco constitucional». Sin embargo, ha recalcado que la crisis política «es un asunto interno» del país.
Así, ha manifestado que Moscú y Ereván no han mantenido contactos sobre la situación, si bien ha añadido que podrían organizarse, al tiempo que ha destacado la importancia del país para Rusia y sus lazos de cooperación.
«Es una línea de colaboración importante, claro que ahora queda pendiente la tarea muy importante de seguir ejecutando las cláusulas del documento trilateral para solucionar el conflicto en Nagorno Karabaj firmado hace unos meses», ha remachado.
La oposición exigido la renuncia de Pashinián desde que el primer ministro acordó con los presidentes de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, y de Rusia, Vladimir Putin, el cese a partir del 10 de noviembre de los combates en Nagorno Karabaj. El acuerdo supone para Armenia la pérdida de parte del territorio que controlaba en esta región bajo soberanía azerí pero autoproclamada como independiente.