La Fiscalía General de Polonia y el ministro de Justicia del país, Zbigniew Ziobro, han solicitado este domingo al Tribunal Constitucional que ilegalice las actividades del Partido Comunista de Polonia (KPP) por incitar al totalitarismo en su carta de principios. La formación comunista se creó en 2002 y desde entonces nunca ha logrado representación parlamentaria.
El Partido Comunista de Polonia fue creado en 2002 y se considera el sucesor del histórico Partido Comunista que existió en el país desde 1918 hasta 1938. Según el comunicado de las autoridades, «los objetivos y la actividad del Partido Comunista de Polonia deben declararse inconstitucionales, y su funcionamiento debe terminar», debido a «la incompatibilidad» de los objetivos de ese partido político con la Constitución de la República de Polonia.
De acuerdo con la Fiscalía, el partido refleja, tanto en el programa como en sus actividades, métodos totalitarios y comunistas, que son contrarios al Artículo 13 de la Carta Magna polaca.
En concreto, la Constitución prohíbe «la existencia de partidos políticos u otras organizaciones que refieran en sus programas métodos y prácticas del nazismo, el fascismo y el comunismo».
«El análisis realizado por la Fiscalía General reveló que sus miembros llaman abiertamente a una revolución, inspirada en la Revolución de Octubre en Rusia, tras la cual los bolcheviques tomaron el poder», añade el mensaje.
Además, según la Fiscalía, el partido tiene el propósito «no solo de tomar el poder, sino también de realizar de manera forzada la nacionalización y la colectivización», según el comunicado recogido por la agencia oficial de noticias rusa Sputnik.
En respuesta, el secretario general del Partido Comunista de Polonia, Krzysztof Szwej, ha denunciado el doble rasero de las autoridades que persiguen a su partido mientras «toleran e incluso apoyan a movimientos de extrema derecha».
«Las épocas de Hitler y Mussolini comenzaron con ataques contra los comunistas y las autoridades actuales protegen a fascistas como (Robert) Bakiewicz, por no mencionar la retórica fascista de los políticos de Solidaridad Polonia», una escisión del Gobernante Ley y Justicia, ha argumentado.
«La utilización de la represión administrativa y legal contra los rivales políticos por tener una opinión diferente de la política económica, social y exterior del Estado es en sí misma una práctica totalitaria contemplada en el Artículo 13 de la Constitución», ha remachado.
«Atacar a un pequeño partido político de izquierda y radical es solo el primer paso. A largo plazo hay un ataque contra toda la izquierda que sigue activa en Polonia para que la hegemonía de la derecha no sea cuestionada», ha remachado.