Allan Lichtman es un profesor de historia que se ha convertido en todo un referente político. Desde hace 36 años ha vaticinado quién será el próximo presidente de Estados Unidos y no ha fallado ni una sola vez.
Para acertar no se basa en la magia ni en las encuestas electorales, sino en un método que ha denominado Las llaves de la Casa Blanca. Esta técnica ha quedado reflejada en su libro, por lo que cualquier persona puede utilizarla para averiguar quién estará al mando del país durante los próximos cuatro años.
Sus predicciones están basadas en la sismología. Empezó a trabajar en esta técnica con un científico ruso, Vladimir Keilis-Borok, en 1981. Desde entonces, establecieron 13 variables: si se cumplen seis o más, no hay terremoto, por lo tanto la presidencia se mantiene estable; si se cumplen menos de seis, habrá cambios.
1. El partido que está en estos momentos en la Casa Blanca ha ganado las elecciones intermedias a Congreso y Senado que se dan a mitad de mandato.
2. No ha habido elecciones internas para elegir otro candidato a la presidencia en el partido en el poder.
3. El actual presidente se presenta a las elecciones (no hay nuevo candidato de su partido).
4. No hay ningún candidato firme de terceros partidos.
5. La economía se mantiene fuerte a corto plazo.
6. Se prevé un crecimiento económico a largo plazo.
7. Ha habido cambios importantes a nivel legislativo durante el mandato (buenos o malos).
8. No ha habido altercados sociales durante la legislatura.
9. La Casa Blanca se ha mantenido sin escándalos durante estos cuatro años.
10. Tampoco han habido fracasos militares.
11. Estados Unidos ha tenido algún éxito destacado en política internacional.
12. El actual presidente tiene carisma.
13. El candidato de la oposición no tiene carisma.
En las elecciones presidenciales de 2020 lo tiene claro: ganará Joe Biden, como así lo ha explicado en The New York Times.