El tenor italiano Andrea Bocelli ha pedido este miércoles disculpas a quienes haya podido herir cuando el lunes dijo que se había sentido «humillado y ofendido» por estar privado de libertad durante el confinamiento decretado en Italia para contener la pandemia del coronavirus.
«Si mi intervención en el Senado ha generado sufrimiento, me disculpo sinceramente, porque no era esa mi intención. Como tampoco era mi intención ofender a quienes han padecido el coronavirus», ha escrito en las redes sociales.
Bocelli, que ha sido uno de los contagiados por coronavirus en Italia, participó el lunes en el Senado en un acto que reunió a médicos, científicos y expertos negacionistas del coronavirus y en el que también participó el líder de la ultraderechista Liga, Matteo Salvini.
En su intervención Bocelli dijo que se sintió «humillado y ofendido» por las medidas de confinamiento decretadas por el Gobierno italiano en marzo para intentar contener el virus y admitió que incumplió la prohibición de salir de casa.
«Hubo un momento, durante el encierro, que me sentí humillado y ofendido por la privación de la libertad de salir de casa sin haber cometido un delito y debo confesar públicamente que desobedecí esta prohibición, que no me parecía ni justa ni saludable», justificó.
Bocelli también restó importancia al virus y pidió que en septiembre los niños pudieran volver a las escuelas.
En su mensaje publicado en las redes sociales, argumenta que su intención fue «esperar que en un futuro cercano los niños puedan recuperar la normalidad; vivir 'como niños', jugar y abrazarse».
«Como saben, mi familia tampoco se ha librado del virus. Todos nos hemos contagiado y temíamos lo peor; porque nadie sabe la evolución de una enfermedad como esta, que todavía es desconocida», apunta.
«A todos los que se hayan podido sentir ofendidos o han sufrido por lo que he dicho, les pido sinceras disculpas, porque mis intenciones eran otras», añade.