Los fallecidos por COVID-19 en el planeta ascienden a 569.738, de acuerdo con las últimas estadísticas ofrecidas este martes por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que sitúan los contagios globales en 12,9 millones, más de la mitad en el continente americano.
Los casos diarios en las últimas 24 horas ascendieron a 215.000, una cifra ligeramente menor a los más de 230.000 registrados en jornadas anteriores.
América concentra 6,7 millones de infecciones, mientras que Europa es la segunda región más afectada con 2,9 millones, seguida de Oriente Medio (1,3 millones), el sur y sureste de Asia (1,1 millones), África (477.000) y Asia Oriental-Pacífico (245.000).
Las curvas de nuevas infecciones siguen mostrándose en fase ascendente tanto en el continente americano como en el sur de Asia y en África, siendo más estables en el resto de regiones.
Estados Unidos, con 3,2 millones de casos, 134.000 muertos y sin haber llegado al pico de infecciones, se mantiene como el país más afectado, seguido de Brasil, la India, Rusia, Perú, Chile, México, el Reino Unido, Sudáfrica e Irán, teniendo en cuenta el número de contagios.
En las estadísticas de fallecidos preocupa el rápido aumento de las cifras en México, que ya es el cuarto país con más muertes (35.000) sólo por detrás de EEUU, Brasil y el Reino Unido.
Los pacientes recuperados se mantienen en torno al 60 por ciento del total, más de 7,7 millones, y la cifra de pacientes en estado grave o crítico, muy estable en los últimos meses, ha subido ligeramente hasta los 59.000, representando un 1 por ciento de los casos activos.