El número de muertos por COVID-19 en el Reino Unido se ha elevado este miércoles hasta 26.097, frente a los 21.678 contabilizados hasta este martes, después de que el Gobierno haya comenzado a incluir datos de fallecidos en residencias y domicilios de Inglaterra, lo que lo convierte en el tercer país del mundo con más muertes a causa del virus.
El ministro de Exteriores británico, Dominic Raab, detalló que las muertes que entran ahora en los registros corresponden a casos ocurridos entre el 2 de marzo y el 28 de abril, por lo que no corresponden a un «incremento repentino» de la mortalidad.