El general Prayut Chan-ocha fue elegido este miércoles primer ministro de Tailandia tras una maratoniana sesión parlamentaria con los votos de 500 diputados y senadores de los 750 que componen ambas cámaras del Parlamento.
Prayut, que lideró el golpe de Estado en 2014, era el candidato del Palang Pracharat, que, aunque es la segunda fuerza parlamentaria con 116 escaños, encabeza una coalición de 19 partidos que le ha proporcionado la mayoría que necesitaba.
La votación, que se produjo tras más de 10 horas de debate en el que se ausentaron gran parte de los parlamentarios, revalida en el cargo al general, que retrasó en reiteradas ocasiones la convocatoria de elecciones que había prometido desde el principio hasta celebrarlas el pasado 24 de marzo.
Prayut, que no es diputado y sólo participó en el acto de cierre durante la campaña electoral, no asistía a la sesión parlamentaria, donde sumó el apoyo de los 250 senadores nombrados a dedo por la junta militar.
El candidato rival, el joven político Thanathorn Juangroongruangkit, obtuvo 244 votos de los partidos anti-junta, al tiempo que hubo tres abstenciones y otros tres parlamentarios no pudieron votar.
La composición del Parlamento no ha estado exenta de polémica, ya que la Comisión Electoral no decidió el sistema para asignar los escaños de la Cámara baja a partir de los votos emitidos por el electorado hasta más de un mes después de los comicios, y el sistema que finalmente empleó ha hecho posible que hayan entrado partidos con un solo diputado, que se han unido a la coalición de Prayut.
Thanathorn Juangroongruangkit, el líder del emergente partido Anakot Mai (Nuevo Futuro), que con 81 escaños es la tercera fuerza en la Cámara baja, fue elegido el martes candidato a primer ministro por una coalición de siete partidos anti-junta.
El político no pudo participar en la votación y se tuvo que conformar con seguirla en una sala cercana al hemiciclo, ya que el Tribunal Constitucional le suspendió temporalmente como diputado hasta emitir su fallo sobre la acusación de la Comisión Electoral de haber violado la Carta Magna al presentar su candidatura cuando poseía acciones de un medio de comunicación.
Anakot Mai, fundado hace tan solo un año, fue la gran sorpresa de las elecciones del pasado marzo, en las que consiguió más de 6 millones de votos gracias a sus políticas progresistas encaminadas a reducir el poder de los militares, su habilidad para comunicarse en las redes sociales y la imagen juvenil y cercana de su líder y de muchos de sus candidatos.
Sin embargo, el partido con más escaños -136- y principal fuerza de la coalición anti-junta es el Puea Thai, cuyo Gobierno fue defenestrado por Prayut en 2014 y que está vinculado al polémico ex primer ministro Thaksin Shinawatra, también expulsado del poder por los militares en 2006 y actualmente en el exilio.
Tailandia lleva más de un decenio inmersa en un conflicto entre los partidarios de Thaksin, popular entre la empobrecida población rural del norte del país gracias a sus políticas sociales, y sectores conservadores encabezados por las élites tradicionales de Bangkok y el Ejército, que veían en el autoritario y ambicioso Thaksin una amenaza a su poder y a la reverenciada monarquía.
El líder del Anakot Mai fue elegido como candidato a primer ministro de la coalición anti-junta porque, tal y como indicó en una entrevista a Efe la semana pasada, los dirigentes del Puea Thai entendieron que «si escogen al candidato entre sus filas, los demócratas y otros partidos no se unirán a la coalición», al estar excesivamente asociada al controvertido Thaksin.
Thanathorn se refería a los diputados del Partido Demócrata, el más antiguo del país y enemigo acérrimo de Thaksin, que en las elecciones obtuvo uno de los peores resultados de su historia, pero cuyos 53 diputados, unidos a los 51 de su aliado Partido Bhumjaithai, lo convertían en el partido bisagra en la votación del Legislativo.
Antes de la sesión del Parlamento, la ejecutiva y los diputados del Partido Demócrata decidieron en una votación interna el martes unirse a la alianza encabezada por el Palang Pracharat para votar al general Prayut.
La decisión del Partido Demócrata ha motivado que su exlíder y ex primer ministro Abhisit Vejjajiva anunciara su renuncia al escaño momentos antes del inicio del debate parlamentario, ya que durante la campaña electoral se había comprometido a no apoyar al general golpista.