La muerte de un niño de 13 años que fue noqueado durante un combate de Muay Thai en Tailandia ha reabierto un debate antiguo sobre si se deben prohibir los deportes de combate que cuentan con niños.
La muerte de Anucha Tasako se produjo después de un partido de Muay Thai el pasado fin de semana en un suburbio de Bangkok, según han informado varios medios de ámbito internacional, entre ellos Al Jazeera.
Según un medio especializado tailandés el menor murió como consecuencia de una hemorragia cerebral. En este tipo de combates no suelen usarse protecciones, y de hecho, un vídeo que circula a través de las redes sociales muestra como el joven luchador no portaba casco.
El Muay Thai o boxeo tailandés es una práctica muy extendida en el país asiático y en otros de su entorno, especialmente en las áreas rurales, donde ofrece una forma de ayudar a los niños a mantener a sus familias y un camino para salir de la pobreza.
Eso es al menos lo que pregonan sus defensores, aunque muchas otras voces hace tiempo que ponen en entredicho esta realidad, y piden que, como mínimo, se obligue a los organizadores a proveer de protección a los contendientes, máxime cuando se trata de menores.