La ministra francesa de Deportes, Laura Flessel, anunció este martes por sorpresa su dimisión, el mismo día en el que está previsto que se acometa una reestructuración del Ejecutivo tras la salida la pasada semana del titular de Ecología, Nicolas Hulot.
Con la salida de Hulot y Flessel, el presidente francés, Emmanuel Macron, pierde a dos de los miembros más populares de su Ejecutivo, coincidiendo con una pronunciada caída de su apoyo en las encuestas.
«Tras 16 meses apasionantes al frente del Ministerio de Deportes he tomado la decisión de abandonar el Gobierno por motivos personales», anunció la excampeona olímpica de esgrima en un comunicado.
Sin embargo, diversos medios consideran que su salida del Ejecutivo se produce horas antes de que fuera cesada dentro de la crisis de Gobierno abierta por la dimisión de Hulot.
La televisión BFMTV apunta que, pese a su popularidad, Flessel era muy criticada en el mundo deportivo, que consideraba que no había sabido defender los intereses de las pequeñas asociaciones en las negociaciones presupuestarias.
Rostro muy conocido en Francia por su carrera deportiva, ensombrecida por un caso de dopaje, Flessel supo aprovechar su experiencia para defender la candidatura de París a los Juegos de 2024, lo que impulsó su popularidad.
También dirigió el Ministerio de Deportes durante la victoria de Francia en el Mundial de fútbol de julio pasado.
En sus años de tiradora de esgrima, Flessel logró dos medallas olímpicas en Atlanta 1996, seis campeonatos del mundo y uno de Europa, lo que le convierte en la francesa más laureada en esa disciplina.