Tras una acalorada discusión con sus padres el pequeño Drew se pagó unas vacaciones en Bali a costa de la tarjeta de crédito de su madre. El menor que vive en Australia, concretamente en Sídney se plantó sin dudarlo en la capital de Bali, Denpasar, en Indonesia donde pasó cuatro noches en un hotel de lujo, informó la televisión australiana 'Nine Network'.
Cuando llegó a Bali se desplazó en bici hasta el hotel All Seasons donde le atendieron sin problema tras comentar que se encontraba esperando a su hermana mayor. Todo esto fue posible gracias a su abuela, él solo tuvo que pedirle el pasaporte poniendo como excusa que se lo habían pedido en el colegio para que ella se lo diera. Y aunque Drew estuviera disfrutando sus padres estaban sufriendo sin saber dónde se había metido su hijo. En declaraciones al programa de televisión 'A Current Affair', explicaban enfadados que Drew «simplemente es un niño al que no le gusta la palabra ‘no' y mira ahora lo que tengo: un niño en Indonesia».
El pequeño sabía que podría viajar solo en un avión si lograba su pasaporte y una identificación de estudiante. Una vez logró eso, se encargó del vuelo y el hotel. En total fueron nueve horas de vuelo en las que recorrió más de 4.000 kilómetros de distancia. Según ha contado Drew a ‘Nine Network', «solo me preguntaron por mi identificación de estudiante y por mi pasaporte para ver que al menos tenía 12 años y que estaba en secundaria». Tras cuatro días en Bali Drew subió a las redes sociales un vídeo en el que se le veía jugando en una piscina y la geolocalización le delató. Así fue como sus padres supieron donde estaba.