El Gobierno argentino dará una millonaria recompensa a quien encuentre en el océano Atlántico el submarino ARA San Juan, desaparecido el pasado 15 de noviembre con 44 tripulantes a bordo, cuyos familiares fueron recibidos este martes por el presidente del país, Mauricio Macri.
«Va a ofrecer una recompensa millonaria. Eso dijo, pero aparte de eso no puede decir más nada. Era lo que estábamos esperando», declaró a la prensa Itatí Leguizamón, esposa del operador de sonar Germán Oscar Suárez, a las puertas de la Casa Rosada, sede del Ejecutivo en Buenos Aires, donde el mandatario se reunió con las familias.
La mayoría de los parientes de los tripulantes llegó a la plaza de Mayo en un autobús desde la ciudad bonaerense de Mar del Plata, donde el buque tenía su base y adonde debería haber arribado desde el puerto meridional de Ushuaia, pero en esa travesía se perdió su rastro.
Marcela Moyano, esposa del suboficial primero Hernán Rodríguez, relató «la sensación» de tener «cara a cara» a Macri y hacerle la petición: «Le dije que hay familias con mucho dolor e incertidumbre, y el señor presidente se tiene que comprometer. Y si él asume ese compromiso, vamos a llegar a encontrar a los 44 para llegar a la verdad y la justicia».
Y es que el principal objetivo de los parientes es que no cese la búsqueda en el océano, que durante semanas contó con la colaboración de países como Estados Unidos y el Reino Unido y que actualmente solo tiene la ayuda de Rusia.
Las familias, que presentaron al jefe de Estado un documento con peticiones, solicitan que se cuente con empresas privadas y que se abra el perímetro de rastreo.
«Nos han escuchado. La sensación es que nos vamos pensando en que se podría llegar a implementar todo lo que hemos pedido. Y esperar a ver si se cumple. Hemos sugerido que la búsqueda se amplíe más hacia arriba», explicó Luisa Rodríguez, familiar del suboficial Ricardo Gabriel Alfaro.
Antes y después de la reunión con Macri y miembros del Gobierno, los familiares salieron a las puertas de la Casa Rosada con pancartas y banderas reclamando justicia.
«Es un alivio que nos haya recibido después de mucha petición. Él (Macri) se presentó una sola vez ante las familias en la base naval (de Mar del Plata) en los primeras días de lo sucedido y nunca más se volvió a presentar. No se si llamarlo llamativo o doloroso», dijo a Efe Norma, hermana del cabo principal Sergio Cuellar.
«Se dicen muchas hipótesis, casi mentiras. No sé que pensar. Con toda la tecnología y los países que nos han ayudado no se sabe nada. Tras estos tres meses lo que queremos es que se sepa la verdad. Es casi doloroso pensar que se oculta algo», agregó.
Tras el encuentro, el ministro argentino de Defensa, Oscar Aguad, aseguró a la prensa que el Gobierno va a «hacer todo lo posible» para hallar el submarino y puntualizó que cualquier barco que lo encuentre puede cobrar la recompensa o un incentivo.
Adelantó que la próxima semana se publicará el monto de la recompensa, aunque no descartó que ronde los 4 millones de dólares.
La búsqueda del submarino en el Atlántico, hasta ahora infructuosa, se delimitó a 430 kilómetros de la costa patagónica, en torno a una zona donde agencias internacionales informaron de la detección de una explosión horas después de desaparecer la nave, cerca de donde se produjo la última comunicación.