La muerte de un koala encontrado clavado a un poste en Australia ha provocado la indignación de grupos de derechos de los animales y ha desembocado en una investigación policial.
El koala podría haber estado vivo cuando fue «cruelmente adherido» al poste de un refugio de madera usando clavos de construcción, aunque fue hallado ya muerto el miércoles, según la plataforma Koala Rescue Queensland en una publicación en Facebook junto a una fotografía del animal.
La imagen muestra a un pequeño koala, con sus miembros alrededor de uno de los postes de madera del refugio, que parece estar agarrando un manojo de hojas de goma. El texto que acompaña la imagen dice «Todo no es como parece». El lugar es un mirador en Brooloo Park, a 140 kilómetros al norte de Brisbane, en el estado de Queensland.
«La policía está investigando el asunto», dijo a Reuters el sargento Pierre Senekal, en la cercana localidad de Kenilworth. Agregó que la Real Sociedad para la Prevención de la Crueldad contra Animales (RSPCA) organizará una autopsia del animal para determinar la causa de la muerte.
La crueldad animal puede acarrear una pena máxima de siete años de prisión o multas de hasta 252.300 dólares australianos (200.000 dólares) en Queensland. «Es un hecho muy perturbador», dijo a Reuters el portavoz de Queensland RSPCA, Michael Beatty.
«Haya estado o no muerto el koala, me sorprende que alguien crea que esto era gracioso, cuando niños pequeños van al mirador».
Los koalas son una de las principales atracciones turísticas de Australia y a menudo son erróneamente descritos como osos, pero en realidad son marsupiales.
Se trata de una especie «vulnerable» bajo la ley de conservación australiana en 2012. Existen menos de 100.000 de esos animales en estado salvaje, incluso hasta 43.000, según estimaciones de la Fundación Koala Australiano.