Tras ser objeto, este año y el pasado, de vandalismo varias estatuas de sant Juníper Serra en algunas de las misiones que fundó en California, el pasado viernes la estatua del fraile petrer que preside la bonita misión californiana de San Gabriel Arcángel fue rociada con pintura roja para simbolizar la sangre derramada de los indios por los evangelizadores españoles.
El pasado septiembre, la estatua de Juníper en la misión de Santa Bárbara fue también cubierta de sangre roja y su cabeza cortada con una sierra eléctrica. Lo ocurrido en aquella misión, y también en la misión de San Fernando, fue un calco del suceso que el pasado viernes aconteció en San Gabriel.
Una vez analizadas las imágenes captadas por las cámaras de vigilancia, se sabe que un individuo a la una de la madrugada arrojó pintura roja sanguinolenta en la cara y torso del misionero, para acto seguido intentar cortar su cabeza de bronce con una sierra eléctrica como hicieron en la misión de Santa Bárbara, pero esta vez el agresor, ciertamente un chapuzas, por más que se esforzó, no pudo cortarla, y dejó solo unos rasguños en la pátina. La policía busca a este individuo y esta vez sí hay posibilidades de que lo capture.