Una jueza de Estados Unidos ordenó la reclusión en régimen de arresto domiciliario para Paul Manafort, exjefe de campaña del actual presidente, Donald Trump, a quien se le fijará una fianza de diez millones de dólares si infringe las condiciones de su reclusión.
La magistrada retiró el pasaporte a Manafort, una de las figuras centrales en la investigación por la supuesta injerencia rusa en las elecciones presidenciales de 2016, y determinó que el acusado solo podrá salir de su vivienda para comparecer ante la corte, reunirse con su abogado y acudir a citas médicas o a actividades religiosas.
Rick Gates, exsocio de Manafort, también tendrá que permanecer bajo arresto domiciliario y, si infringe las condiciones de detención, deberá depositar una fianza de cinco millones de dólares, según fijó la jueza Deborah A. Robinson durante una audiencia en la Corte del Distrito de Columbia.