El Dalai Lama ha declarado este sábado que dependerá del pueblo tibetano si continúa o no la institución que representa como líder espiritual de la región del Tíbet, en un momento en el que comienza a discutirse la posibilidad de una sucesión.
"Que esta institución (que representa) siga adelante o no depende del pueblo tibetano. Así pues, consultemos a la gente. Si creen que esta institución ya no es relevante, la daré por finalizada automáticamente", ha aseverado el Dalai Lama, de 82 años de edad, durante una conferencia en el estado indio de Arunachal Pradesh, cerca de la frontera con China.
En este sentido, el monje tibetano ha manifestado que tiene intención de comenzar "discusiones preliminares" sobre su sucesión en algún momento de este año, con vistas a una decisión final en un plazo máximo de ocho años (cuando cumpliría 90 años) si antes no queda incapacitado o fallece, en el peor de los casos