Un hombre supuestamente en posesión de un arma blanca y con un paquete sospechoso se atrincheró este martes en un hotel de la cadena Formula 1 de la localidad de Bollène, en el sur de Francia, tras mantener un altercado con el gerente del establecimiento.
El Grupo de Intervención de la Gendarmería Nacional (GIGN) ha desalojado el hotel y ha establecido un perímetro de seguridad de 230 metros alrededor del mismo.
El diario Le Figaro cita a una fuente de la Gendarmería para señalar que el individuo «habría tenido un altercado con el gerente» del hotel.
«Estamos esperando la llegada de los negociadores», agregó la misma fuente a «Le Figaro», mientras que el diario Metro News agregó que la gendarmería ha llamado a los artificieros.
Se trata del segundo suceso del día en Francia, cinco días después del atentado de Niza que dejó 84 víctimas mortales y más de 300 heridos.
A unos 250 kilómetros al norte de esa localidad, en una residencia veraniega en la localidad de Garde-Colombe, un hombre agredió este martes con un cuchillo a una mujer y sus tres hijas, de entre 8 y 14 años.
Las cuatro se encuentran hospitalizadas y la más pequeña estaría en estado crítico, informó a la cadena «TF1» el alcalde Garde-Colombe, Edmond Francou.
El sospechoso, un hombre de origen marroquí que veraneaba en el lugar junto a su familia, no estaba fichado por radicalización islámica y se encuentra detenido tras haber sido capturado por dos reservistas de la Gendarmería.
El fiscal a cargo del caso, Raphaël Balland, desmintió en conferencia de prensa que el atacante -acusado de «tentativa de homicidio»- hubiera hecho referencia a la ropa de las mujeres antes de apuñalarlas, como habían apuntado algunos medios en Francia.