La Policía ha levantado el bloqueo impuesto en el Capitolio de Estados Unidos, sede del Congreso, después de dar por concluida sin consecuencias una alerta de seguridad que mantuvo los accesos cerrados durante menos de una hora.
Poco después de las 9.00 (hora local), las fuerzas de seguridad pidieron al personal y a los visitantes que se mantuviesen encerrados y lejos de puertas y ventanas. Tres cuartos de hora después, la Policía del Capitolio dio por «concluido» el incidente y autorizó la vuelta a las «operaciones normales».
Una portavoz policial ha explicado que se ordenó el bloqueo de las instalaciones como un «exceso de precaución», mientras se investigaba la posible presencia de una persona sospechosa en el interior del edificio, según el periódico 'The Washington Post'.
El congresista republicano Dennis Ross aseguró al diario The Hill que se había visto a un empleado dentro del edificio con un arma de fuego.
A los trabajadores del Congreso se les instó a ir a una sala y «cerrar, sellar y mantenerse lejos de las puertas exteriores y ventanas».
La portavoz de la policía del Capitolio, Eva Malecki, informó que el cierre se habían producido como «medida de precaución».
La noticia del cierre del Congreso se produjo a la vez que se conocían más detalles de la matanza de cinco policías en Dallas, que ha dejado además nueve personas heridas, a manos de un francotirador ocurrida anoche.