Al menos 63 personas murieron al explotar una bolsa cargada de explosivos encontrada en un antiguo campamento del grupo yihadista Boko Haram en la localidad de Monguno, en el noreste de Nigeria, informaron hoy fuentes vecinales.
Los hechos ocurrieron ayer, cuando un grupo de vecinos se reunió en torno a la bolsa, hallada a las afueras del municipio por una patrulla ciudadana, según el rotativo nigeriano «Premium Times».
La explosión fue tan potente que provocó daños incluso a los viandantes, indicó uno de los miembros del grupo de seguridad ciudadana, Haruna Bukar.
«No fue un ataque de Boko Haram, sino una explosión de una bolsa encontrada llena de bombas», aclaró.
Explicó que, «cuando encontraron la bolsa, que después resultó estar llena de artefactos explosivos improvisados, la llevaron al centro de Monguno, donde la gente se reunió para echar un vistazo».
Mientras registraban el contenido de la bolsa, las bombas desencadenaron una gran explosión, que mató a al menos 63 personas y provocó decenas de heridos.
Monguno -a unos 130 kilómetros de la capital del estado de Borno, Maiduguri- ha sufrido repetidos ataques de Boko Haram, el último de ellos el pasado 25 de enero, cuando los insurgentes asaltaron el cuartel militar y saquearon los hogares de la mayoría de los residentes.
Nigeria, bajo el liderazgo de su nuevo presidente, Muhammadu Buhari, ha intensificado sus esfuerzos para sofocar la campaña terrorista de Boko Haram.
La semana pasada, Buhari auspició una reunión de la Comisión de la Cuenca del Lago Chad en Abuya, donde se acordó el despliegue de una fuerza multinacional permanente a partir del 30 de julio para combatir a los radicales en todos los países afectados de la región: Nigeria, Chad, Camerún y Níger.
En las últimas dos semanas y coincidiendo con la investidura de Buhari como presidente, Boko Haram ha reanudado su campaña de atentados y ha matado a unas 150 personas en ataques suicidas en Borno.