El segundo de al Qaeda, Nasser al-Wuhayshi, murió en un bombardeo estadounidense en Yemen, lo que deja fuera de combate al director de una serie de ataques contra Occidente y a un hombre alguna vez visto como el sucesor del líder Ayman al-Zawahri.
Se trataba de un cercano colaborador de Osama bin Laden en los años en que se llevaron a cabo los ataques del 11 de septiembre de 2011 contra blancos estadounidenses. Wuhayshi, de origen yemení, fue nombrado por Zawahri como el número dos de al Qaeda en 2013.
Con una recompensa de 10 millones de dólares ofrecida por las autoridades estadounidenses, Wuhayshi también era líder de Al Qaeda en la Península Arábiga (AQPA), y su muerte debilita potencialmente al grupo, visto como la rama más fuerte de la red militante.
Wuhayshi lideró el grupo cuando planeó ataques con bomba contra aerolíneas internacionales que fueron desbaratados y se adjudicó la responsabilidad por la matanza en el diario satírico francés Charlie Hebdo, que calificó como un castigo por insultar al profeta Mahoma.
El integrante de AQPA Khaled Batarfi dijo en un vídeo publicado en internet que Wuhayshi «falleció en un ataque estadounidense que lo tenía como objetivo a él y a dos de sus hermanos muyaidines, descansen en paz».