Al menos veinte trabajadores murieron y tres resultaron heridos al ser tiroteados este sábado por un grupo de hombres armados en el suroeste de Pakistán mientras dormían, informó a Efe una fuente oficial.
El tiroteo se produjo hacia las 02.00 hora local (21.00 GMT) cerca de la ciudad de Turbat, en el distrito de Kech de la provincia de Baluchistán, dijo a Efe un portavoz de la Administración local, Mumtaz Ali.
Los heridos y los cuerpos de los fallecidos, que procedían de las provincias de Sindh (sureste) y Punyab (este), fueron trasladados al hospital del distrito, afirmó el comisionado adjunto de Kech.
El primer ministro, Nawaz Sharif, y el presidente de Pakistán, Mamnon Husain, condenaron la matanza y ordenaron una investigación inmediata.
El jefe de Gobierno de la provincia, Abdul Malik Baloch, convocó una reunión de emergencia y el Gobierno provincial anunció compensaciones para las familias de las víctimas, que según medios locales trabajaban en el sector en la construcción de obras públicas.
Turbat se encuentra entre las zonas de Baluchistán donde grupos insurgentes son más activos y se producen ataques contra trabajadores.
En octubre, fueron encontrados los cuerpos de ocho trabajadores muertos por disparos después de que un grupo de empleados de una granja avícola fuera secuestrado por hombres armados en esta provincia.
Baluchistán es una provincia fronteriza con Afganistán e Irán, la más extensa y menos poblada de Pakistán, que es escenario habitual de ataques de grupos secesionistas, milicias islamistas y redes mafiosas que operan en todo el país.
Estas milicias recurren a atentados contra instituciones públicas, Fuerzas de Seguridad y puntos de interés económico en una provincia con importantes recursos mineros, así como a asesinatos selectivos de trabajadores de etnias distintas a la baluchi, consideradas «invasoras».