El Gobierno israelí ha autorizado la liberación de 104 presos palestinos tras una dura votación que finalmente se ha saldó con los votos favorables de 13 ministros, entre ellos el primer ministro Benjamin Netanyahu, frente a siete votos en contra y dos abstenciones.
Tras seis horas de reunión, el Consejo de Ministros autorizó la iniciativa planteada por Netanyahu, una de las condiciones pactadas con los palestinos para la reanudación de las negociaciones de paz que se reanudarán formalmente en cuestión de días.
Entre los ministros que han votado en contra de la liberación están miembros del partido Likud de Netanyahu como Gilad Erdan o Yisrael Katz, así como los ministros de Israel Beiteinu Yair Shamir y Uzi Landau y miembros de Hogar Judío (Bayit Yehudi) como Naftali Bennett, Uri Ariel y Uri Orbach. Dos ministros del Likud, Silvan Shalom y Limor Livnat, se han abstenido.
Momentos difíciles
«Este momento no es fácil para mi, ni para los ministros, y especialmente para las familias de las víctimas, a quienes entiendo muy bien, pero hay momentos en que se deben tomar decisiones difíciles por el bien del Estado y este es uno de esos momentos», declaró Netanyahu durante el Consejo de Ministros.
Una vez aprobada por la Knesset o Parlamento israelí se formará una comisión que estará integrada por Netanyahu, el ministro de Defensa, Moshe Yaalon; la ministra de Justicia, Tzipi Livni; el ministro de Seguridad Pública, Yitzhak Aharonovitch, y el ministro de Ciencia y Tecnología, Yaakov Peri, y que será la encargada de cerrar los nombres que se incluirán en la lista de presos a liberar y el momento en el que se harán las excarcelaciones.
Un alto cargo del Likud, el diputado Meir Dahan, remitió una carta abierta a los ministros alertando de que van a liberar a «los asesinos de judíos con una insoportable facilidad». Varios ministros del Likud, como el ministro de Transportes, Yisrael Katz, denunciaron presiones de Netanyahu.
«No puedo votar a favor de liberar a asesinos terroristas, de herir a las familias y fomentar el terrorismo. Lo dije bien claro hace una semana, así que no tiene sentido presionarme», ha argumentado.
Por otra parte cientos de personas, incluidas víctimas de atentados terroristas, se concentraron frente a la oficina del primer ministro, en Jerusalén, para protestar por estas liberaciones. «Para mí no es una cuestión política, sino una cuestión moral», ha asegurado el director de la oficina para Israel de la Organización Sionista de América, Jeff Daube, quien particippó en la concentración.
En la manifestación se exhibieron pancartas con fotografías en blanco y negro de las víctimas de los atentados terroristas perpetrados por los presos que previsiblemente serán liberados. «Estoy disgustada con el hombre al que he votado (Netanyahu), quien dijo que nunca liberaría a terroristas. Ya lo ha hecho dos veces», se ha lamentado otra manifestante, Trudy Gefen, en referencia a la liberación de 1.027 presos palestinos a cambio del soldado israelí Gilad Shalit, secuestrado en la Franja de Gaza.