El presidente de Estados Unidos, Barack Obama,ha dicho que las explosiones en Boston fueron un «acto de terrorismo», pero ha destacado que todavía no está claro si las dos detonaciones eran obra de un grupo local o extranjero o de un «individuo malintencionado».
En una aparición en la Casa Blanca, Obama instó a los estadounidenses a estar vigilantes y alertas sobre cualquier actividad sospechosa, después de que dos explosiones sacudieron la meta del Maratón de Boston causando la muerte de al menos tres personas y dejando más de 100 heridos.
Obama dijo que todavía queda mucho por investigar sobre el que fue el peor ataque en suelo estadounidense desde el 11 de septiembre del 2001.
Todavía no se conoce el motivo ni hay indicios de quién plantó las bombas y las hizo detonar, destacó el mandatario, condenando lo que calificó como un «acto cobarde y cruel».
«Cuando se usan bombas contra civiles inocentes, es un acto de terrorismo», dijo Obama. «Lo que todavía no sabemos es quién es responsable de los ataques o por qué, si fue planeado y ejecutado por una organización terrorista -local o extranjera- o si fue un acto de un individuo malintencionado», agregó.
El presidente ordenó que la bandera estadounidense de la Casa Blanca esté a media asta en memoria de las víctimas.
Obama destacó que la investigación está comenzando.
«Va a tomar tiempo seguir cada pista y determinar lo que pasó. Pero vamos a lograrlo», señaló. «Vamos a encontrar a quien haya sido que dañó a nuestros ciudadanos y lo llevaremos a la justicia. También sabemos esto: los estadounidenses se rehúsan a ser intimidados», sostuvo. (Reporte de Steve Holland, Roberta Rampton, Jeff Mason y Gabriel Debenedetti; Editado en español por Javier Leira)